lunes, 3 de junio de 2013

El que la sigue, la consigue...

Imagen de Robert ParkeHarrison


En un antojo repentino y obsesivo, quiso ordenar todos sus recuerdos.

Probó a numerarlos.  Se quedó dormido al llegar al ciento treinta y dos mil cuarenta y siete.

Intentó clasificarlos alfabéticamente.  Se atascó en la h, pues casi todos ellos eran mudos.

Trató de agruparlos por colores. Se le rebelaron los blancos y los negros en escalas de grises.

Consideró apilarlos. Ninguno quería estar por encima del otro,  y solidariamente se desparramaron.

Decidió en un alarde de desesperación e ingenio, suicidarse.

Saltó por la ventana, y mientras caía al vacío, una organizadísima película de todos y cada uno los retazos de su vida pasó ante sus ojos.

Dicen, que antes de estamparse contra el  suelo, el vecino del primero B;  que en ese instante se asomaba al balcón;  escuchó al difunto gritar: ¡lo conseguí ¡


20 comentarios:

  1. Basta un segundo, o menos, cósmico para reventar con montones de recuerdos y vomitarlos como hizo el *big-bang que se puso a dar campanadas londinenses y todo su cerebro lleno se le vació en millones de recuerdos a-cumulados que se estrellaron en un temporal vacío que al expandirse fue construyendo su propia vida.
    En un instante la memoria puede ser prodigiosa como tu mente para expresar tan humilde y buen relato.
    Mola, pues "revelándose" proyectó contra ellos la película impresa de su vida contra el suelo...
    Versión acortada del director
    [*Cronos:Big-Ben :)) ]
    ["Nada como rebelarse de verdad con uve y a su vez revelar su vida]

    ResponderEliminar
  2. Esta semana el recuerdo de un viaje al caribe que hice con un amigo mio de niñez que me ha dejado para siempre de un dia para otro y sin avisarme revolotea por mi cabeza y me hace tenerlo presente para que no lo olvide nunca y asi acordarme de él siempre con una sonrisa en vez de con una lagrima.Disfruta del viaje querido amigo.Aunque te has mudado a otro "barrio" siempre estaras en el mio.....D.E.P.

    ResponderEliminar
  3. Es que hay cosas que tienen un orden natural y hay que esperar a encontrarlo.

    ResponderEliminar
  4. Y de que le sirvió entonces?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para saber que se podían ordenar, supongo.

      Eliminar
    2. Si, pero en que momento.

      Eliminar
  5. La pena (y me remito a mi último microrrelato) es que ese vecino no tuviera una cámara para grabarle la película de su vida... Ay... ;-) Muaksss

    ResponderEliminar
  6. Y yo que prefiero el desorden natural...;) . Buen relato.

    ResponderEliminar
  7. Me gusta la ironía crítica que subyace en toda la pieza, Dalicia.

    Gran trabajo.

    Un saludo,

    ResponderEliminar
  8. Se le amontonaron todos los recuerdos, uno encima del otro, y esa fue su sentencia. La única posible.

    Un beso ;)

    ResponderEliminar
  9. Decía Ciorán que la gente se suicida en un momento de suprema lucidez, más o menos, pues eso...

    ResponderEliminar
  10. AAhhh!!!
    qué difícil es saber lo que corre por el pensamiento antes del vacío... pero debe ser tan intenso, tan doloroso!!...
    No tener ningún recuerdo para enmarcar debe ser angustioso!
    La mente es tan compleja

    Besos abisales

    ResponderEliminar
  11. Tremendo...una pena no poder seguir ordenando nuevos recuerdos...

    ResponderEliminar
  12. qué bueno, por Dios! bravo por tu capacidad de imaginación!

    ResponderEliminar
  13. Lo que se empieza se acaba, debe ser así. Pero todo es mejorable, en la fase de montaje de la película se podrían eliminar frases oídas en televisión como: "estamos trabajando en ello", por ejemplo.
    Muy bueno.

    ResponderEliminar
  14. Una pena que lo consiguiera tan tarde. Y no, no es cierto eso de que nunca es tarde...
    Besos.

    ResponderEliminar
  15. A veces nos empeñamos en conseguir cosas como ordenar recuerdos en lugar de vivir el momento creando nuevos recuerdos increibles...así somos: cabeciña que non para.

    Abrazos

    ResponderEliminar
  16. Hummm... todavía no conozco la veracidad de la teoría que dice de esas personas que antes de morir recorren toda su vida en un segundo, porque no tendrían la capacidad de contárnoslo (salvo a través de una ouija). Tampoco ésas que ven un túnel. Lo que sí me creo a pies juntillas es lo que escuchó el vecino del primero B, y me recuerda a una canción de Kortatu. :-P

    Ahora en serio: muy buen texto, como todos los que te he leído :-)

    Un besito.

    ResponderEliminar
  17. Y es que la obsesión por el orden no puede llevar a nada bueno...
    Muy buen post! me ha encantado el relato!

    Un beso :)

    ResponderEliminar
  18. hace tiempo conoci un tipo una noche fria de invierno que se me aparecio y me dijo: ¡¡ no vale la pena !! deja todo como esta ¡¡¡

    ResponderEliminar