Foto de Taylor Marie McCormick
María se abría a sus días mirando al sol y con la cara
limpia.
Con el alma tranquila y el corazón nervioso hacía equilibrismos
de propósitos en el alféizar de sus pestañas. Subían en suave remolino desde su
estómago para hacerse tacto y realidad al asomar en la yema de sus dedos, y
mientras, caprichosa, su mirada, se
dedicaba a hacer piruetas cual derviche por toda la estancia.
Un día la vi tejiendo olas en la cala verde. Melena al
viento compitiendo con el sol de la mañana, ensortijándosele entre las agujas
de punto, calcetando las horas y alfombrando de
guiños la estampa.
Al día siguiente no estaba. Supe que se había quedado en
casa, sola y desnuda revolviendo las sábanas.
Haciéndose abrazos la cintura,
mientras desgranaba duermevelas apasionados y tranquilos arañando el colchón de
la cama.
Hubo días que me la encontré haciendo eternos los momentos
más efímeros de la ciudad. De cada instante una historia, de cada historia una
estampa; siempre atenta, siempre animada. Sintiendo la brisa salada en su cara,
y acariciada su piel por sedas y rasos que hilvanaba en su casa.
Cuando no la veía, me contaban, que por la escalera del
edificio de su casa, campaban a sus anchas vapores a barniz alegre y olores
amables a tarta de galletas. A ella se
la oía cantar, a su pasión se la intuía bailar, y a cada sonrisa suya la
vivienda se iba haciendo hogar.
María se abría a sus noches mirando a la luna y con el alma
limpia.
Con la ilusión intacta
y el corazón tranquilo, se cobijaba bajo las mantas para dormir al abrigo de
sus sueños, que subían en armonioso remolino desde su vientre, para hacerse esbozos
de realidad al asomar la mañana siguiente.
* Para María*
Me gustan todas las pinceladas, pero el cuadro me sabe a poco. :P
ResponderEliminar¿ "Purcuá"? ;)
EliminarMmmmmmmm, quiero más. :)
EliminarPreséntamela!!!!
ResponderEliminarLas marías siempre son así. No hay más que verlas tejer y uno se enamora de ellas al instante.
ResponderEliminarBss
María es afortunada. Pocos pueden decir hoy dia que duermen bien por la noche.
ResponderEliminarDa gusto leer como pintas el alma humana en trazos uniformes con tu pluma virtual.Bravo y Petons!!!
ResponderEliminarSi la ternura tuviera nombre de mujer, se llamaría María (¿o es que al alma femenina también se le llama María?)
ResponderEliminarLo importante de la vida no son esas ocasiones especiales o grandes eventos que, de muy vez en cuando, acontecen.
ResponderEliminarNo...
Lo verdaderamente importante es disfrutar con las pequeñas cosas que pasan todos los días...
(y una de las de hoy, fue leerte)